(Français) Gracias al trabajo coordinado de las redes Scalabrinianas, las jóvenes Paloma y Araceli (seudónimos) pudieron regresar sanas y salvas a Asunción, Paraguay, tras haber sido engañadas por tratantes de personas quienes les prometieron oportunidades de trabajo en Brasil. El caso pone de relieve la presencia de redes de trata de personas en Sudamérica, pero también la eficacia del trabajo en red de las distintas instancias Scalabrinianas y otras instancias eclesiásticas en la defensa de las potenciales víctimas.